Salmos y experiencia personal de Dios

Salmo 26. Agarrado al Padre

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

Antífona. Ante la mirada de tu amor:
Señor, ten piedad de mí.


Padre, cuento con tu amor;
Has puesto en mí el deseo de acogerte

Con una total confianza,
A pesar de las tentaciones que me asaltaban.

He sido puesto a menudo a prueba
Mediante impulsos de pecador
Que nacen en lo más íntimo de mí.

Pero me conservas siempre fiel;
Me tienes enganchado a la Vida verdadera:

No comercializar con el mal,
Nada de compromisos hipócritas,

Rechazos de toda inclinación a hacer el mal.
Huida de todas las divinidades falsas.

Incluso mi corazón permanece fijo en ti,
Necesito tu misericordia
Para purificarme de mis gafes diarios

Y para mantenerme contigo, en la verdad
Cuando publico tus maravillas.

Padre, me gusta descansar contigo;
Me gusta permanecer en tu amor.

No permitas que llegue a ser amigo del mal,
Ni que destruya a mi semejante.

No quiero sembrar la muerte a mi derredor
A cambio de beneficios egoístas.

Me uno a ti sin condiciones,
Padre, sé bueno conmigo;
Guárdame libre de todo mal.

Nada podrá quebrantarme en la tierra
Y te bendeciré ante todo el mundo.